viernes, 3 de diciembre de 2010

MALENA


Renato es un adolescente que vive con su familia en Castelcuto, un pueblo costero siciliano, en los a�os en que "Il Duce" reinaba con brazo de hierro a un pueblo sumiso y obediente.
Malena es una joven y atractiva esposa cuyo marido est� en el frente de batalla. Diariamente, cuando pasea por el pueblo o va de compras, ocasiona un rumor generalizado en el villorrio. M�s que eso, el movimiento de sus caderas, la l�nea de sus piernas, el sonido de su tacos eclipsa cada pensamiento que no coincida con el de su figura desafiante. Los hombres se quedan embobados, las mujeres hierven en celos y los adolescentes onanistas sue�an con poseerla. No existe ninguno habitante de Castelcuto que se sienta indiferente ante su carnosa presencia.
Renato se enamora perdidamente de ella. �l y su grupo de amigos pedalean incansablemente para no perderse ni un paso de Malena en el que pueda insinuarse un curva, una transparencia. El despertar sexual de Renato es mostrado por medio de artificiosas escenas c�micas que dejan muy claro los roles familiares y sociales que juegan los miembros de la familia Amoroso.
Luego de la muerte de su padre Malena queda pr�cticamente desamparada. Para acrecentar aun m�s la sensaci�n de soledad le avisan que su marido muere en la guerra. Como la escasez que provoca la guerra es tan aguda se ve obligada a pagar los alimentos con su cuerpo. Pronto se decide a no pasar m�s ni hambre ni abstinencia por lo que se prostituye abiertamente. Sus clientes son principalmente soldados alemanes y comerciantes.
Este comportamiento la transforma en el mayor peligro para las se�oras envidiosas italianas que, ni bien termina la guerra, deciden darle una lecci�n de por vida. No es lapidada pero casi.
Renato asume una posici�n similar a la de sus pares: observa en silencio sin emitir ni siquiera un ruido. Malena se va del pueblo humillada.
Al poco tiempo el marido de Malena regresa para sorpresa de todos. Renato se encarga de hacerle saber donde fue. La pareja regresa al pueblo y Malena recupera esa dignidad que todos le arrancaron un d�a, es aceptada porque ahora tiene un marido. Renato se autoabsuelve de culpas y el resto de la comunidad tambi�n.
La perspectiva de Tornatore, que no carece de nostalgia y cari�o por esa �poca, es muy cr�tica -aunque no expl�cita- con respecto de esa sociedad que padeci� ese periodo infame de la historia italiana.
Su construcci�n no intenta ser revisionista, ni tampoco quiere castigar ideol�gicamente, pero no desconoce la responsabilidad de cada ciudadano en Castelcuto por la infelicidad de Malena. Tornatore no quiere desenmascarar a nadie porque ese no es el objetivo del film, no obstante, el recuerdo del primer amor tiene un tel�n de fondo en el que abundan las caricaturas, los mitos, los defectos, las deformidades y hasta los demonios que acompa�aron a esa generaci�n.
A Tornatore no le interesa ser ni juez ni parte, su �nica lealtad es con Malena, el personaje interpretado discretamente por la sensual Monica Belucci, que solo desea la felicidad.
La conducta desproporcionada de ciertos personajes, como el de su padre, no hace otra cosa que a�adirle una capa de afecto a esa aborrecible figura paterna que se construye en la adolescencia. "Malena" es el sencillo homenaje que Tornatore le rinde a su padre, cuyo film abre con estas palabras:
"Yo ten�a 13 a�os. Un d�a, a fines de la primavera de 1941, la vi por primera vez... Lo recuerdo muy bien porque esa misma tarde, mientras Mussolini le declaraba la guerra a Francia y a Gran Breta�a, yo recib� mi primera bicicleta".

               

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